sábado, 30 de abril de 2011

La peor pesadilla que he tenido

Normalmente todos mis sueños implican emociones extremas como caer de un precipicio con un paracaídas a la espalda, sueños en los que estoy disfrutando al máximo, incluso he tenido sueños donde fornico con muchas personas famosas y no tan famosas, sueños en los cuales lloro y ruego por mi vida, sueños en los cuales hago llorar y rogar a otros por su vida.

Sueños trastornados de sexo, drogas y paranoia en su máxima expresión, he tenido infinidad de sueños anti climáticos, sueños en los que nunca pasa nada pero se presta el sueño y la acción que ocurre dentro de el para hacer algo genial, ser un héroe, un villano, un sobreviviente, en esta ocasión el último fue el que ocurrió.

En mi sueño había perdido todo, mi dinero, mi casa, mi familia, amigos y me había quedado en la calle tras recibir una golpiza propinada por mis propios amigos, me quedaba en la calle, tirado sin un peso en la bolsa y sin nada de ropa, excepto la que tenia puesta, la extremadamente rasgada y manchada de sangre y escupitajos que traía puesta.

Entre mis lamentos y recuentos, aparecía un tipo que creía haber visto en otro sueño, si, hablo de mi anti climático y buen pedo, desbordante de buen-ondismo anticristo de pantalón khaki y playera sin estampado, se acerco a mí con un cigarrillo lucky en la mano derecha, el cual era sostenido con los dedos meñique y anular, una forma bastante extraña y “marica” de fumar.

Sin embargo el viejo anti (así lo bauticé) me prometió sacarme de la mierda en la que estaba y me decía que lo haría como un paro, que el mundo ya estaba suficientemente jodido como para que el haga algo, me dijo que no le importaba ayudarme, que él me daría un refugio, dinero, comida y ropa, yo accedí a ir con él, pues mi antiguo entorno había desaparecido por una razón que desconozco, solo recuerdo la putiza, pero entes de eso nada.

Anti me llevo a un edificio enorme, tan enorme y cerrado/seguro/anti escapes/aquí ya te jodiste si entras que era tan imponente que incuso daba miedo.

Me dijo:

Lo único que tienes que hacer es sobrevivir, no harás ningún trabajo que no quieras hacer, no se te castigara en absoluto, tu solo sabrás si debes algo a esta gente con el tiempo, tampoco eres libre de irte cuando quieras, solo te irás cuando estés listo y eso tu no lo decides, lo decide otra persona, otra aun más importante que cualquier otra de este mundo.

Accedía a entrar, en ese momento poseía rencor por todos, por mis amigos, padres, hermanos, incluso me cagaba y daba rencor el propio aire, pues me la pasaba gritando sandeces y golpeteando el aire,

¿Por qué no la pared?, porque no lograda divisar ninguna y cuando golpeaba al piso este no se sentía, de una forma u otra me tranquilizaba y comenzaba a pensar.

No he comido en varios días, tengo hambre, necesito ropa también, debo buscarla, me levantaba y comenzaba a caminar entre el inmenso y oscuro vacio que me rodeaba, mientras pensaba como conseguir todo lo que deseaba, termine en una sala, alrededor había muchas habitaciones, un baño enorme con regaderas tipo ejercito y un comedor tipo piratas del Caribe.

Todo el lugar estaba repleto de gente tan desorientada como yo, en ese sueño veía como muchos hombres golpeaban a otros hombres por quitarles cosas, por otra parte, recuerdo ver a una mujer no más grande que yo, abrazando algo, aferrándose a él, dentro de mi me preguntaba ¿será dinero?, de un momento a otro decidí que iba a ir y arrebatárselo de las manos, mientras me acercaba, otra persona se me adelanto, pero él le intentaba arrebatar las cosas de una forma más agresiva, comenzaba a patear a la mujer y a golpearla en la cabeza, yo dentro de mi me enfurecía, por que muy probablemente hubiera hecho eso, intente no mirar, pero el colmo fue cuando el tipo la intentó violar, ahí enfurecí completamente y fui hacia él, lo golpeaba como pudiera, el de un golpe me tumbaba, en cambio yo no parecía hacerle ningún daño y nadie más me ayudaba, recuerdo haber tomado un ladrillo del suelo terroso de un patio y reventárselo en la cara, haciendo así que él se pierda y otras personas se le lanzaran a los golpes, quizás también tenían rencores en contra suya

La mujer me agradecía, la cual aun continuaba abrazando un bulto entre sus brazos,

¿Qué es tan importante como para arriesgar tu vida por ello, acaso tienes oro o
diamantes ahí?.

No- me contestaba,- en realidad es mi hija, se llama Karen.

Mientras me decía eso, yo veía a la pequeña entre sus brazos, era una cosa diminuta,
de piel blanca y cabellera castaña, al igual que su madre en ese momento, la niña parecía aspirar a una bella mujer cuando fuera grande.

Pues bien, después de eso, en mi sueño hubo una laguna, después de ella solo recuerdo que un tipo nuevo llegaba al lugar, el tipo era un HOMELESS apestaba a mierda cocida, orines retozados y era una persona mugrosa, su olor incomodaba a todos, el solo nos miraba con desprecio, a la chica que en mi sueño llamaba carlet, por su color de cabello, que según yo, era color escarlata, scarlet, ¿encaja para ustedes?

A mí y a la niña Karen que ya era una pequeña capaz de caminar, el tipo no dejaba de vernos y me incomodaba su despreciable ser, esa cara de pervertido cada vez que ponía su mirada en carlet.

Aunque no me hubiera hecho nada, solo lo odiaba, por su apestosa manera de ser y de quitarnos de en medio para conseguir lo que quisiera, el colmo fue cuando yo me encontraba haciendo fila para conseguir algo de comida para nosotros 3 (Karen,carlet y yo), el tipo por su asqueroso olor, repelió a todos en la fila, el tipo tenía posibilidades de bañarse y cambiarse la ropa, pero no lo hacía, el repelió a todos en la fila, excepto a mí, quien permaneció ahí, mientras escogía algo para los tres, vi un pequeño montón de uvas, era obvio que se lo iba a llevar a la niña, pero cuando lo iba a tomar, el tipo me ponía su asquerosa mano en la cara y me la restregaba en la boca, solo lo hizo para poder tomar esas uvas, yo inmediatamente voltee y comencé a vomitar, pues su inmundicia había entrado en mi boca, de un momento a otro me llené de furia y arremetí contra él, comenzaba a putearlo con la fuerza de mil soles, lo raro era que el no ponía resistencia, al parecer quería ser golpeado, ¿un masoquista tal vez?, no le iba a cumplir su puto gusto, así que me detuve y me aleje, el me dijo: Tu eres como yo, maldito hipócrita, por qué crees que estas aquí.

Volvía a arremeter contra él, solo que esta vez lo golpeaba con una roca en la cara, lo hacia una y otra vez hasta que lo logré matar, me había ganado la furia, porque en realidad tenía razón, éramos iguales, cuando me levantaba de encima de él, miraba a mi alrededor y anti se encontraba observando, el resto de la gente, entre ella Carlet y Karen me observaban, que coño me ven-gritaba- les hice un favor a todos.

No lo he mencionado, pero estaba perdidamente enamorado de Carlet, quien es otra persona en la realidad, es una mujer con la que nunca pude estar, es solo que no recordaba su rostro y por proteger su identidad la seguiré llamando Carlet, la pequeña si es fruto generado espontáneamente en mi sueño, pero yo estaba totalmente enamorado de ella, la sensación de “tener” un hijo siempre se me ha hecho una a la que le he tenido mucho miedo, sin embargo, esa niña era tierna, una niña que me hubiera gustado llamar hija en la realidad.

En mi sueño, casi como la escena patética de la pareja en la película x romántica, con música melosa de fondo, pasaban muchos momentos con Carlet y ya niña,

Anti me decía: Eres libre de irte.

Como las voy a dejar a ellas 2, no, yo me quedo hasta que se vayan conmigo, -el me contestaba- ellas no se quieren ir contigo, Carlet te odia y no deja que Karen este contigo.

Anti tenía razón, así que intentaba arreglar las cosas, matar una persona es una carga pesada, aun en sueños, cuando la encontraba, ella se encontraba fornicando con otro tipo, la niña se encontraba fuera del cuarto sin puertas, escuchándolo todo.

Asi que yo me ponía a llorar, me acercaba a la niña, la tomaba en brazos y lloraba con ella, pues al parecer también estaba triste, yo quería quedarme con Karen, al menos con ella, pero su madre no me lo permitiría.

Asi que en mi sueño me quedaba ahí, a las sombras, cuidándolas a ambas y cuando logran salir por la puerta, la niña ya me buscaba cuando habia problemas y continuaba conmigo, incluso me llamaba Papà, obviamente esa experiencia, aun en un sueño, me conmovía.

Asi, cuando logran salir Carlet y Karen, yo las sigo, pero algo me impedía salir, una barrera invisible, Anti se acercaba y me decía, por confidencialidad, les damos tiempo para salir, deberás esperar un tiempo para que tu también puedas salir.

Yo le preguntaba cuanto, el me decía: una hora, un dia, una semana, un año, una
década, no lo se quizás hasta un siglo.

Asi como lo dijo, me tarde dos cuartos de siglo para salir, cuando salía, buscaba a ambas.

Carlet ya era una anciana senil y no lograba recordarme, Karen era una junkie perdida en drogas que se prostituía y yo, un anciano que no hacía nada más que lamentarse y llorar por no haber estado ahí, aunque no se tratara de mi esposa y mi hija, yo las consideraba asi.

MIS GRANDES TEMORES SON LA INCERTIDUMBRE, LA SOLEDAD, EL SER OLVIDADO, EL SER RENCOROSO, EL SER EGOISTA, EL NO ENCONTRAR AL AMOR DE MI VIDA y otro, aunque sea algo estúpido EL AGUA.


Es por eso que este sueño reconoce todo, por eso es una pesadilla para mí.

1 comentario:

Anónimo dijo...

woo esta criminal tu sueño al igual que tu le tengo miedo a la soledad y no encontrar al amor de mi vida pero a lo que mas le tengo miedo es a la oscuridad es como si en mi representara un vació en no existo. de todos modos gracias por compartir tu sueños con esta comunidad otaku. casualmente encontré en tu pagina por casualidad pues estaba buscando las etapas que lleva una persona para llegar a ser un otaku. jeje okaz me voy